
Comunicación y Resiliencia: Redes Sociodigitales Durante Desastres
En este artículo, exploraremos la comunicación de desastres en redes sociodigitales, centrándonos en el caso del sismo ocurrido el 19 de septiembre de 2017 en México.
En el ámbito de la gestión de desastres, la comunicación desempeña un papel esencial para la resiliencia y recuperación de las comunidades afectadas. En este contexto, las redes sociodigitales se convierten en herramientas clave que facilitan la interacción y coordinación entre diversos actores involucrados. Este artículo se sumerge en el segundo capítulo de un estudio específico que examina cómo se desarrolla la comunicación durante desastres naturales, centrándose en el caso del sismo ocurrido el 19 de septiembre de 2017 en la Ciudad de México.
Para comprender el enfoque del estudio, es esencial definir el concepto de desastre. Quarantelli destaca tres paradigmas principales, centrándonos en entender los desastres como procesos vinculados a la vulnerabilidad social y la alteración de las relaciones humanas. La incertidumbre en desastres modernos se relaciona con la creciente complejidad de las sociedades, donde la ciencia y la tecnología contribuyen más a la incertidumbre que a la seguridad. Ulrich Beck sostiene que la sociedad moderna combina ciencias sociales, ciencias de la materia y construcción discursiva del riesgo. Los desastres actúan como catalizadores de la acción colectiva, evidenciando la capacidad de adaptación de los individuos y la estructura social en condiciones de crisis. Los sistemas sociales son la verdadera fuente de vulnerabilidad en los desastres.
Esta diversidad de enfoques refleja la complejidad de los desastres, requiriendo la consideración de factores externos e internos. El sistema de telecomunicaciones en desastres es abierto, con interdependencia de factores tecnológicos, ambientales, socioculturales y económicos. En el caso del sismo de 2017 en México, el Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC), definido por la Ley General de Protección Civil, coordinó la respuesta ante desastres. Nos enfocaremos en la gestión reactiva durante la contingencia, especialmente en la fase de auxilio. La comunicación en esta etapa es crucial, y la Ley establece la prioridad de auxilio a la población y la coordinación entre niveles de gobierno.
Siguiendo la teoría de sistemas complejos, exploraremos los grupos emergentes durante desastres. Durante el sismo, plataformas como Twitter y Facebook se convirtieron en espacios vitales para la difusión de información en tiempo real. Grupos ciudadanos, espontáneamente formados en redes sociodigitales, desempeñaron un papel crucial en la movilización de recursos y ayuda. Por ejemplo, cuentas de Twitter como @AyudaAAyudar y @MascotasSismo @Verificado19S se organizaron para realizar labores de rescate y proporcionar información verificada. Estos grupos emergentes demostraron la capacidad de la comunicación digital para coordinar esfuerzos de auxilio de manera rápida y efectiva.
Al abordar la comunicación de desastres en redes sociodigitales, es esencial comprender la complejidad del sistema social y cómo interactúan sus componentes durante una crisis. La gestión integral del riesgo, la estructura del SINAPROC y el comportamiento colectivo proporcionan una visión holística de cómo la comunicación juega un papel crucial en situaciones de desastre. La comunicación efectiva durante desastres, especialmente a través de redes sociodigitales, es esencial para la coordinación y el auxilio a las comunidades afectadas. La complejidad de los desastres modernos exige un enfoque interdisciplinario y una comprensión profunda de los sistemas sociales y su dinámica. El caso del sismo en México ofrece una oportunidad para analizar cómo la comunicación en redes sociodigitales se convierte en un componente vital de la gestión de desastres, y futuras investigaciones deben seguir explorando estos fenómenos para mejorar la preparación y respuesta ante situaciones de crisis.